Facebook acuerda con tres editores australianos el pago por noticias
San Francisco, EEUU. Facebook alcanzó este viernes acuerdos con tres editores de medios de comunicación australianos para pagarles por la publicación de noticias, un día después de que el Parlamento de ese país aprobase una ley que obliga a las grandes tecnológicas a negociar este tipo de pagos a los medios locales.
Los grupos editores que alcanzaron acuerdos con la red social son Schwartz Media (que publica “Saturday Paper” y “Monthly magazine”), Solstice Media (propietarios de “New Daily” y “City Mag”) y Private Media (editor de “Crikey”), según publicó la prensa australiana.
Estos acuerdos se formalizarán en los próximos dos meses y por el momento no han trascendido informaciones relativas a los detalles exactos o a las cuantías que Facebook pagará a los editores.
La firma de Menlo Park (California, EE.UU.) se limitó a indicar en un comunicado que estos acuerdos “traerán una nueva hornada de periodismo de calidad, parte del cual antes era de pago, a Facebook”.
Por su parte, la consejera delegada de Schwartz Media, Rebecca Costello, apuntó que su empresa lleva tiempo colaborando con la red social y que espera “con ilusión” ver cómo este acuerdo les ayuda a “seguir produciendo el periodismo independiente líder en Australia”.
La firma que dirige Mark Zuckerberg también levantó este viernes el bloqueo que impuso la semana pasada a la publicación de las noticias en Australia.
Desde la madrugada, unos 13 millones de usuarios de Facebook en Australia pueden acceder de nuevo a las cuentas de los medios de comunicación, como los públicos ABC y SBS, así como los canales privados 9 y 7 y los diarios “Sydney Morning Herald” o “The Age”, entre otros medios, y compartir sus noticias con normalidad.
Durante el bloqueo, que ha durado unos 8 días, las páginas de los medios aparecían sin contenido, mientras que cualquier intento de compartir un enlace periodístico generaba un aviso donde la plataforma explicaba sus razones sobre la medida.
Facebook se quejaba por una serie de artículos del por entonces proyecto de ley, que tenía como objetivo obligar a las tecnológicas a alcanzar acuerdos de pago con los medios de comunicación por el contenido que crean.