Expertos recomiendan alianzas público-privadas para fortalecer la atención de salud primaria
Santo Domingo. Para que en República Dominicana se puedan ofrecer servicios adecuados, en el primer nivel de atención de salud, deben fomentarse alianzas público privadas que fortalezcan la regulación y supervisión, así como ofrecer incentivos adecuados, sobre todo en los centros de salud más alejados y en localidades con un desarrollo económico limitado.
Así lo plantea la investigación “Atención primaria en salud en Latinoamérica y el Caribe: Experiencias Exitosas y Lecciones Aprendidas”, presentado por el Observatorio de la Seguridad Social (OSES) del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), en un evento virtual transmitido por el canal de YouTube de la universidad.
El estudio, realizado por los investigadores Magdalena Rathe y Marc Gibert, advierte que en el país hay un gran déficit de unidades de atención primaria (UNAP) y de centros de atención primaria (CAP), en vista de que se necesitaría más del doble de los que existen. Señaló que la calidad de estos centros es pobre y que apenas el 30% cumple con las condiciones mínimas para operar.
Rathe dijo que República Dominicana tiene carencias de profesionales de la salud familiar para que sean los encargados de desarrollar la atención primaria de salud, al respecto, destacó que un 60% de las UNAP son atendidas por médicos pasantes y solo un 5% cuentan con médicos familiares.
Los investigadores concluyen que debido a las promesas incumplidas en el Seguro Familiar de Salud los pacientes se dirigen directamente a los especialistas, por lo que en República Dominicana nunca se ha implementado, de forma efectiva, el primer nivel como puerta de entrada.
El estudio destaca que corresponde a las Aseguradoras de Riesgos de Salud (ARS) contratar el primer nivel, pero que los proveedores privados se han opuesto a establecerlo y los públicos tienen baja calidad y capacidad resolutiva.
Asimismo, recomiendan crear un mecanismo de afiliación para que el 20% de la población que todavía carece de algún tipo de aseguramiento pueda incorporarse al sistema.
“Es necesario fortalecer la capacidad institucional de las entidades estatales reguladoras de los prestadores de servicios de salud de nuestro país y, en particular, la capacidad de regulación de honorarios, copagos y procedimientos actualizados y justificados”, puntualizó Eladio Pérez, epidemiólogo y coordinador del OSES, al finalizar la presentación de los resultados de la investigación.
El epidemiólogo sostuvo que es pertinente desarrollar una unidad de evaluación de tecnologías sanitarias que delimite una ruta explícita y permita el sometimiento, evaluación, adquisición, monitoreo y evaluación de equipos, fármacos e insumos realmente necesarios, con un standard de calidad mínima y un mecanismo de incorporación al Sistema de Seguridad Social.
“Se requiere promover una cultura de innovación que acelere las mejoras, no sólo de las capacidades científicas y tecnológicas del sistema, sino de provisión de servicios e inclusión social y mejorar la costo-efectividad del sistema en términos de cobertura, transparencia, inclusión y calidad”, señaló.
Indicó que se requiere promover la investigación multidisciplinar como estrategia a mediano y largo plazo de adaptación del sistema y como parte de un ciclo de mejora continua, explorando alianzas tipo triple hélice: universidad, empresa, sector público, donde las alianzas público-privadas incluyan el amparo científico y académico para mejorar la eficiencia y calidad del sistema.
El galeno señaló que el estudio presentado por el OSES aspira a convertirse en una base para la discusión legislativa que conlleve a una reforma social e integral del sistema, tal como está estipulado en el artículo 29 de la Ley 13-20, que fija para septiembre del 2020 el inicio de la reforma integral del Sistema Dominicano de Seguridad Social.