Dominicana’s Got Talent: “reafirma país cuenta con muchísimos talentos”
Los participantes de Dominicana’s Got Talent sueñan con ganar la competencia, pero antes de ellos, otros soñaron en grande con el talento de los dominicanos.
Los productores ejecutivos que han materializado su sueño más fantástico fueron Gilberto Morillo, David Maler, Nashla Bogaert y Tuto Guerrero, quienes lograron conquistar a los dueños de la franquicia internacional para darle un sabor aplatanado a este popular reality show.
“Yo era fanático del show y siempre lo veía junto a mi hija. Cuando ella va a partir a la universidad me surgió la idea de traer la franquicia al país. Quería darle el ejemplo de que todo lo que uno se proponga lo puede lograr trabajando duro”, recuerda Gilberto Morillo.
Así se inició una travesía de cuatro años, en la que se fueron montando en el barco más aliados. Primero fueron Nashla y David, quienes luego lograron convencer a Tuto de sumarse a esta odisea.
Desde montarse en un avión rumbo a Londres para una reunión de dos horas que se volvió en 6 horas, hasta irse por dos días a Nueva York, en el 2015, para vivir las experiencias de las grabaciones, todo ese esfuerzo es lo que hoy no se ve en pantalla, pero que fue determinante para poder adaptar con éxito este formato.
Un equipo de 250 personas que trabajan como una maquinaria bien aceitada es el responsable de que cada miércoles las familias dominicanas puedan sorprenderse con las habilidades de los participantes.
Los productores confesaron que fue difícil vender el proyecto a los patrocinadores, pues ahora mismo la confianza en las producciones de TV nacionales no es la misma que hace años.
“Deseaba regresar a la televisión con un proyecto que les devolviera a los dominicanos lo que me dieron, que fue una oportunidad. Cuando Gilberto nos lo presenta entendimos que era muy arriesgado. Económicamente hay que levantar muchos fondos. Estamos hablando de un proyecto millonario.
En un momento como este en el que la gente no cree en la televisión dominicana, salir a la calle a vender este proyecto, diciendo que es la oportunidad de elevar la calidad y el amor por lo bueno, era muy retador. Pero decidí darle porque era la mejor forma de yo regresar y tener ese contacto con el público”, afirmó Nashla.La edición
Algo que el público no sabe es que lo que hemos visto hasta ahora en pantalla no sigue un orden cronológico. Los actos que se presentan en un capítulo pueden no corresponder al mismo día de grabación. Ha sido un reto para Tuto condensar tantas actuaciones, incluso confiesa que muchas no llegaron a verse en TV por no cumplir con el nivel de calidad.
“Fueron cuatro años de desarrollo. Tuvimos que hacer una ingeniería inversa del proyecto y determinar cómo lo podíamos hacer. Pero nada, nos preparó para ver en vivo estos actos que eran demasiados emocionantes. Tener 200 cámaras grabando y condensar a una hora y 20 minutos de contenido y lograr que el público sienta nuestras mismas emociones, eso vale mucho”, dijo Tuto Guerrero.