Educa señala desafíos de nuevo Plan de Educación Horizonte 2024-2034
Santo Domingo. La organización Acción Empresarial para la Educación (Educa) destacó las fortalezas, y debilidades, «puntos críticos» que, según entiende, son necesarios señalar con el propósito de contribuir al fortalecimiento del «Plan de Educación Horizonte 2024-2034», que presentó recientemente al país el Ministerio de Educación, como una respuesta renovada ante los desafíos históricos que enfrenta la educación preuniversitaria dominicana.
A través de su director ejecutivo, Darwin Caraballo, Educa consideró que la educación preuniversitaria en la República Dominicana enfrenta retos históricos que demandan soluciones de corto plazo e impostergables y advierte que «la sociedad dominicana no tolerará una década más de inversión sin resultados significativos en el aprendizaje de los estudiantes».
Tampoco tolerará que se siga «hipotecando el tren de la historia que una vez más vuelve a pasar y depende en buena medida del cultivo del talento humano como principal factor de producción en la sociedad del conocimiento».
Caraballo dijo para garantizar el éxito, será imprescindible abordar sus debilidades, con especial énfasis en el financiamiento, los mecanismos de seguimiento y la integración tecnológica, al tiempo de abrir la discusión para repensar en una transformación de fondo de las estructuras organizativas y modelos pedagógicos vigentes.
Señaló ademas, que aunque su potencial es notable y bien intencionado, también existen áreas críticas que necesitan atención para maximizar su impacto y minimizar el riesgo de dilución como le ha ocurrido en el pasado a iniciativas con similares propósitos.
Entre las fortalezas de este esfuerzo destaca la participación amplia y consultiva, su visión sistémica del problema educativo, la planificación estratégica con resultados medibles, la alineación con compromisos nacionales e internacionales, así como su énfasis en innovación educativa y formación docente.
Darwin Caraballo sostuvo que en esta próxima década, los resultados deberán ser tangibles. Lo sembrado deberá germinar y consolidarse. De los muchos errores y de algunos aciertos se deberá aprender para evitar nuevas frustraciones y perdida de oportunidades para alcanzar la prosperidad de la sociedad dominicana.
«El plan se articula con el Pacto Nacional para la Reforma Educativa, cuya vigencia plena se extiende hasta el año 2030, la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, consolidando su pertinencia dentro de marcos normativos globales y locales. Esta sinergia refuerza la consistencia en la implementación de políticas educativas», indico Caraballo