En 2024 el compostaje será obligatorio en los hogares de Francia
A partir del 1 de enero de 2024, en Francia las comunidades tendrán la obligación legal de dar una solución para que todos sus vecinos reciclen sus residuos vegetales mediante compostaje.
Cáscaras de huevo, borra de café, desechos de frutas y verduras e incluso flores cortadas… Todos ellos son biorresiduos, es decir, “residuos orgánicos putrescibles”, en palabras del gobierno francés. Por lo tanto, todos ellos pueden convertirse en abono mediante compostaje.
El primer paso para lograr este objetivo es que los hogares dispongan de un contenedor adicional, que será recogido por camiones volquete específicos, como ocurre con otros contenedores de clasificación.
«Desde el punto de vista agrícola, [el compostaje] es muy útil para la buena salud del suelo”.
Por otra parte, se instalarán contenedores colectivos, como los de vidrio, y los hogares deberán tirar allí sus biorresiduos. Finalmente, se distribuirán compostadores individuales a los residentes que puedan hacer compost en casa.
“2024 es un año histórico, pero todavía vemos que, desde 2021, ha habido una aceleración real de las demandas de las autoridades locales”, explica Muriel Bruschet, referente francés de los biorresiduos en la Agencia de Transición Ecológica (Ademe).
Por lo tanto, la medida se implementará gradualmente. Es decir, no todas las comunidades podrán ofrecer soluciones a sus ciudadanos en relación al compostaje a partir del 1 de enero.